Dragones Unión Team México

4.743K corridos, 543 días viajando

Hay algunos encuentros que hacen historia. Como fue el que tuve con los Dragones Unión Team México. Apolo me contactó por Instagram nada más poner un pie en México (no te pierdas ese momento, Aterrizaje en Cancún), y como yo ya tengo cayo en ésto de los encuentros iniciados por esta vía (puedes leer el primero en Casi imposible retirada de Tirana), pues no dudé, como dicen aquí, en “aventarme” a la aventura. Pero es que el plan prometía: Apolo había seguido mis aventuras, y me tentó la idea de ir a correr por allí con su equipo de traileros, los Dragones.

El entorno de la sierra de Puebla

Apolo me recogió en Puebla, y tras darme unas pinceladas de la ciudad (entonces no sabía la cantidad de cosas que me contaría de cada sitio por el que pasáramos), nos pusimos rumbo a la sierra de Puebla. En concreto hacia La Gloria, una población próxima a La Unión (de dónde reciben el nombre los Dragones) dónde asenté mi campamento (bueno, más bien mi mochila) los días que estuve por allí. Y a pesar de llegar casi a las 2 de la mañana, ¡al día siguiente no perdoné ir con los chicos a las 5 de la mañana a hacernos nada menos que 17K 😉 Eso sí, al final nos esperaban unas tortillas calentitas en la tortillería del pueblo. ¡Qué mejor final!

Pero el plan fue más que completo no sólo por la parte de correr y por el entorno. H y Tati, mis huéspedes en La Gloria, se portaron estupéndamente conmigo: además de compartir veladas y algún que otro paseo por allí, me trataron como una hija. ¡Hasta la fecha no me había hospedado con una familia mexicana!

Y ni que decir tiene la agenda de festejos que me tenía preparada por ahí Apolo. Para continuar con el mundo rural, quedamos en lo alto de un cerro al que nunca llegué, con la consiguiente desesperación del personal: me perdí y se me hizo de noche. ¡Pero no llegó la sangre al río: si no no estarías leyendo estas líneas! La aventura acabó con que tuve que pedir prestado el móvil en una tienda para avisar y que me vinieran a buscar 😉 Y fueron, ya ves 🙂

Pero además del mundo rural, entre los planes propuestos había ¡una participación en la radio! Los sábados por la mañana, en Libres (la ciudad más cercana), Apolo colaboraba con La Grande, una radio de corte liberal (para hacer honor al nombre del lugar). Y ese sábado me invitaron a participar: Susana, Álex, Apolo y yo tuvimos una charla más que entretenida. ¡Se me pasaron volando las 2 horas de programa!

En la radio La Grande

Otro planazo (o súper plan que se dice por aquí) fue apuntarnos a una carrera. ¡Mi primera carrera mexicana! Y además fue full experience: fuimos el día antes a recoger el dorsal en Xico, la localidad donde se celebraba el evento. Además de la típica feria del corredor, tenían muchos comercios adheridos a la carrera que te invitaban a probar sus productos: ¡nos pusimos las botas! Y el día de la carrera terminó con un nada despreciable ¡segundo puesto! Pero he de decir que… ¡Malditas salidas escalonadas! Me sacó 1 segundo la primera… En cualquier caso, ¡súper experiencia: Ruta del Totomoxle (8K)!

Aprovechando nuestra visita a Xico (Veracruz), visitamos Xalapa (la capi de la provincia), donde básicamente lo que hicimos fue ¡correr! por parques, cerros, y lo que se puso por delante. Bueno, y también visitamos la city y comí más fast food que nunca: perritos y pizza, en días seguidos 😉

Corriendo por Xalapa

Fue una visita espectacular, de la que espero no olvidarme… Y para ello tengo hasta la camiseta oficial de los dragones ¡grabada con kilómetros para el mundo! ¡Muchas gracias Dragones!

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